La crisis, muy perjudicial para nuestra salud bucodental

Que la situación económica está estropeando nuestra sonrisa no es nada nuevo, la verdad. Y no hablamos solo de que cada vez nos riamos menos dados los problemas que tienen muchas familias y amigos de nuestro entorno, sino porque también está afectando a la salud bucodental de los españoles. Los nervios, el estrés y el agobio están favoreciendo la aparición de problemas en nuestra boca, algo que hace que lleguemos a necesitar con más frecuencia tratamientos dentales y ayuda de profesionales de la Odontología. Un dato revelador al respecto: el 90% de los españoles sufre de maloclusión dental.

Esta se manifiesta con un problema en el alineamiento de los dientes, por lo que hay problemas para ajustar los dientes superiores e inferiores (la mordida). Esto ocasiona dolores de cabeza, ruidos en el oído, mareos y otras dolencias. El problema se agudiza en situaciones de especial nerviosismo. Una de las patologías más frecuentes asociadas a una incorrecta oclusión es el llamado bruxismo, que es el hábito de apretar y rechinar los dientes. Esto suele manifestarse durante el sueño y provoca dolor. Además, es importante evitarle o ponerle solución porque puede originar un desgaste importante en los dientes.

Para prevenir bruxismo y la maloclusión dental, es importante realizarnos revisiones periódicamente y prestar atención a los síntomas de malestar e incomodidades que vayamos teniendo. Desde pequeños, además, podemos llevar a los niños al dentista para que puedan ver exactamente qué está ocurriendo. Los profesionales dicen que para prevenir las consecuencias de estos problemas hay que hacer revisiones a partir de los seis años. Y cualquier intervención que se decida realizar debe ser para mejorar la mordida.

En España hay un infradiagnóstico de este tipo de patologías. Hasta hace un tiempo no se le prestaba especial atención pero con el tiempo han ido siendo muchas las personas que han necesitado acudir a sus profesionales odontólogos de confianza para saber qué podía estar pasando y ponerle remedio. Esto se puede solucionar, en el caso del bruxismo, con células para la noche. Si el problema es mayor, igual se necesita que la persona lleve un aparato dental.