Un viaje triste

Todavía recuerdo el día en que mi hermana nos decía que se marchaban a Aranjuez porque su marido había encontrado trabajo cerca de allí y no podía pegarse el palizón todos los días de coche. El mundo se te viene encima y más cuando estás muy unida. Claro somos tres hermanas y junto con mi madre nunca nos hemos separado por ningún motivo, y aunque ella siempre ha sido más independiente que nosotras, la verdad que también lo pasó muy mal. Y es que para un cambio así nadie está preparado, dejar tu hogar y a tus seres queridos la verdad que no es plato de buen gusto para nadie. Pero es que cuando no queda más remedio hay que hacerlo.

Con lo que nos pusimos con ella a ayudarla a prepararlo todo y aunque los muebles no se los iba a llevar porque iban a alquilar la casa, os aseguro que llenamos un camión de todo lo que se llevó. Recuerdo que mientras que embalábamos todo no parábamos de contar anécdotas graciosas y de caérsenos un lagrimón que otro. Pero es que la vida es así y la verdad que no les quedó más remedio. Claro como nunca habíamos hecho una mudanza la verdad que no sabíamos a quien acudir y la verdad que tampoco queríamos que nos engañaran.

A sí que buscando por internet encontramos a http://www.mudanza-madrid.eu y vimos que se movían por los diferentes distritos de Madrid incluso hacían mudanzas nacionales e internacionales, así que mi hermana pidió presupuesto y fueron ellos los encargados de realizar la mudanza que como bien he dicho antes menos mal que no se llevaba los muebles sino hubieran tenido que echar dos viajes. Qué verdad que es eso que dicen que no te das cuenta de lo que tienes en casa hasta que realizas una mudanza, porque es ahí donde realmente sale todo lo que guardamos, algunas veces sin ni siquiera hacernos falta.

A sí que nada durante tres años estuvieron viviendo allí, y la verdad que los echábamos mucho de menos, hasta que por suerte para nosotros él encontró trabajo aquí y se volvieron a venir a su casa. Qué verdad que es que cuando falta un miembro la familia está incompleta desde luego una verdad como un pino, por suerte volvemos a estar completos y sin miras de futuro de tener que realizar ninguna mudanza más.