El País de los Pirineos siempre será una excelente opción vacacional

Andorra, pequeño principado ubicado entre España y Francia, es un destino turístico que ofrece diversión, relax, contacto con la naturaleza y aventura. Quien viene siempre querrá regresar porque siempre hay algo nuevo para disfrutar

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Para quienes se están preguntando dónde pasar el próximo periodo vacacional, una de las opciones a incluir en la lista de destinos a escoger puede ser perfectamente Andorra, una región en la que hay mucho por descubrir.

Para los españoles visitar este país, uno de los más pequeños del mundo, no resulta una travesía por lo relativamente cerca, de hecho desde Madrid en coche serían unas seis horas aproximadamente, tiempo que se reduce si el medio de transporte es el tren.

Este principado independiente, a pesar de ser pequeño en extensión, concentra muchos atractivos que lo han convertido en un destino vacacional predilecto que sorprende siempre. La variedad que ofrece hace de Andorra un lugar apto para realizar turismo familiar, de naturaleza, deportivo, de relax, de pareja o amigos, hay para todos los gustos.

La diversión es protagonista

Son muchas actividades que se pueden realizar en Andorra en los que la diversión siempre va a ser la protagonista. Un plan que es imperdible es visitar el parque Naturlandia, ubicado en la parte alta del bosque de La Rabassa, en donde sobran la aventura y el ocio al aire libre.

En tiempos de invierno es un deleite familiar practicar esquí de fondo en los 15 kilómetros de pista con trazados de distintos niveles de dificultad, con un paisaje entre bosques y montañas imposible de olvidar. Funciona allí una escuela de esquí para niños y adultos.

Durante el verano Naturlandia ofrece a los visitantes atracciones como el tobogán alpino más largo del mundo; el Tobotronc, que tiene 5,3 kilómetros de longitud. Además cuenta un sky trail de 13,5 metros de altura.

Otras actividades que se pueden realizar son excursiones con vehículos eléctricos, partidas de paintball, montar en poni, deportes como tiro con arco, golf, patinaje, golf, variedad de circuitos, salidas con guías y muchas más.

La afluencia de turistas que tiene esta región gracias al parque, ha incidido en la proliferación de packs muy atractivos que incluyen hospedaje para quienes escogen este lugar para pasar días de esparcimiento familiar. Es así como vemos ofertas que cubren hotel + entradas a Naturlandia Andorra como las que Clickando aquí pueden ver y reservar de manera muy sencilla. Los hoteles están ubicados en zonas como Sant Julià de Lòria, Andorra la Vella y Les Escaldes.

Caldea es otro de los lugares que no se pueden dejar de visitar en este principado. Son 20.000 metros cuadrados de instalaciones que hacen de este el centro termolúdico más grande del sur de Europa. Cuenta con jacuzzi, estaciones de hidromasajes, hermosas piscinas y cascadas, además de restaurantes y espectáculos maravillosos. El relax en este lugar está garantizado.

Otros parques que se pueden visitar son Vallnord Mountain Park con múltiples actividades para los más aventureros y el Family Park Canillo con muchas atracciones pensadas para los más pequeños.

Es un paraíso natural

Las rutas de senderismo atraen a muchísimas personas al llamado País de los Pirineos en tiempos de verano. Quienes han visitado Andorra cuando el blanco es lo que predomina, se asombran al ver cómo tras el paso del invierno la frescura de un verde intenso predomina en un entorno natural de leyenda.

Estos hermosos senderos que nos llevan a las más espectaculares vistas no son solo para expertos, hay paseos con diversos niveles de dificultad para que, incluso, esta maravilla natural se pueda disfrutar en familia. Guías especializados están dispuestos para acompañar a los visitantes dándoles a conocer datos interesantes datos históricos y culturales del entorno.

Uno de los recorridos más interesantes es la conocida Ruta del Hierro, en el pueblo de Ordino, un camino fácil y agradable que perfectamente puede realizarse con niños. El sendero avanza paralelo al río Valira hasta llegar a la Mina de Llorts, el Camino de los Arrieros o la Fragua Rossell, lugares que evocan el pasado minero y siderúrgico de Andorra.